0 0
Read Time:7 Minute, 40 Second

Para los nuevos gobernantes de Afganist??n, mantener la presi??n sobre ellas es una especie de marketing. Pero todav??a puede costarles caro

??Por qu?? los talibanes est??n eliminando muchas de las libertades obtenidas con tanto esfuerzo por las mujeres afganas???Esta puede parecer una pregunta ir??nica. Despu??s de todo, cuando los talibanes gobernaron el pa??s en la d??cada de 1990, su r??gimen fue conocido por tener algunas de las restricciones m??s crueles del mundo para las mujeres. El grupo todav??a se adhiere a una visi??n fundamentalista de la sociedad isl??mica.

Pero la ideolog??a es solo una parte de la historia.

Cada grupo tiene una variedad de creencias, y no todas son prioridad para la gobernanza. Algunos funcionarios talibanes, en particular aquellos que realizaron negociaciones de paz y est??n a favor de la colaboraci??n internacional, han sugerido que esta iteraci??n del gobierno talib??n podr??a ser menos restrictiva para las mujeres. Adem??s, sin duda existen incentivos econ??micos, ya que la reanudaci??n de la ayuda internacional depender??a al menos en parte de algunas consideraciones en materia de derechos humanos.

Al parecer, nada de eso ha marcado una diferencia hasta el momento. Aunque algunos funcionarios talibanes siguen afirmando que las condiciones mejorar??n, las mujeres siguen sin poder ingresar a los lugares de trabajo y a las escuelas. Cada semana parece traer consigo un nuevo informe de restricciones.

Bajo esa realidad, la decisi??n de los talibanes de restringir la libertad de las mujeres comienza a parecer tanto una decisi??n pol??tica como una cuesti??n de ideolog??a. Los expertos afirman que comprender la raz??n por la que los talibanes podr??an percibir esa decisi??n como algo gratificante ofrece una idea de la estrategia de construcci??n de Estado del grupo y de la naturaleza de la sociedad que gobiernan de nuevo.Mujeres en Ghazni (Jim Huylebroek/The New York Times)Mujeres en Ghazni (Jim Huylebroek/The New York Times)

La inseguridad de la seguridad talibana

???Ni por un segundo cre?? que los talibanes hab??an cambiado???, dijo Muqaddesa Yourish, una exviceministra de Comercio que huy?? con su familia a Estados Unidos cuando los talibanes tomaron el poder. ???Si algo ha cambiado en ellos es que saben c??mo lidiar con Occidente???.

Menos de dos meses despu??s de que los talibanes tomaron el control de Afganist??n, las promesas de que las mujeres podr??n ir a la escuela y a sus lugares de trabajo a??n no se han hecho realidad. La mayor??a de las mujeres tiene prohibido ir a trabajar. Supuestamente es una medida temporal que, seg??n los talibanes, es necesaria para la seguridad.

La dirigencia est?? utilizando las mismas palabras para describir el momento en que las mujeres podr??an tener autorizaci??n de asistir a las universidades p??blicas. Cuando las escuelas secundarias volvieron a abrir sus puertas, los talibanes les ordenaron a los ni??os que regresaran a las aulas, pero no mencionaron a las ni??as, lo que fue interpretado por las familias de todo el pa??s como una orden para que las ni??as se quedaran en casa.

Grupos como el de los talibanes por lo general tienen problemas para hacer la transici??n de la insurgencia violenta al gobierno real, dijo Dipali Mukhopadhyay, investigadora de la Universidad de Minnesota, quien estudia a los gobiernos rebeldes en Afganist??n, Siria y otros lugares.

No tienen la experiencia, el financiamiento ni el personal para brindar servicios gubernamentales sofisticados. En vez de eso, su principal fortaleza es el control de la seguridad: utilizar su estatus de ser el grupo violento m??s poderoso del pa??s para operar una especie de extorsi??n de protecci??n a nivel nacional, en la que intercambian seguridad p??blica por obediencia.En las paredes del antiguo Ministerio de Asuntos de la Mujer en Kabul, los rostros de las mujeres fueron borrados de los murales el mes pasadoEn las paredes del antiguo Ministerio de Asuntos de la Mujer en Kabul, los rostros de las mujeres fueron borrados de los murales el mes pasado

???No deber??amos apoyar esta narrativa de que son una alternativa al gobierno anterior porque proporcionan seguridad???, dijo Metra Mehran, cofundadora de la Campa??a de Perspectivas Femeninas, que buscaba llevar la voz de las mujeres a las negociaciones de paz: ???No est??n proporcionando seguridad; solo han dejado de matarnos???.

Mukhopadhyay hizo eco de ese sentimiento. ???Esa es la piedra angular para comprender lo que ofrecen los talibanes: seguridad y tambi??n la amenaza del uso de la fuerza???, dijo. ???Pero la gente, en especial las mujeres, saben que esa forma de seguridad viene vinculada a una ideolog??a???.

Visto a trav??s de ese lente, restringir la libertad de las mujeres funciona como una poderosa demostraci??n del poder de los talibanesCuando las mujeres y ni??as desaparecen de las oficinas y las escuelas, se demuestra que los talibanes tienen suficiente poder ???y, de forma impl??cita, suficiente capacidad y voluntad para usar la violencia??? para redise??ar dr??sticamente los espacios p??blicos.Mujeres en Ghazni (Jim Huylebroek/The New York Times)Mujeres en Ghazni (Jim Huylebroek/The New York Times)

???El talib??n en cada hombre???

Pero la mercadotecnia es solo una parte de la historia. A pesar del apoyo y el financiamiento para estrategias de igualdad de g??nero durante 20 a??os de gobiernos respaldados por Estados Unidos, las libertades de las mujeres afganas siempre han sido fr??giles.

Yourish afirma que siempre ha sentido que a muchos hombres afganos les incomoda la presencia de las mujeres en la vida p??blica. Su propio padre y esposo apoyaron su carrera, pero por lo general parec??an ser casos aislados, dijo.

En los ??ltimos d??as antes de la toma del poder por parte de los talibanes, Yourish cont?? c??mo ella y sus amigos intercambiaron historias sobre c??mo estaba ???emergiendo el talib??n en cada hombre???. Hombres desconocidos se le acercaban a ella y a otras mujeres en la calle y les gritaban amenazas cr??pticas como ???tus d??as terminar??n pronto???, dijo. Yourish pudo sentir c??mo se desmoronaba el progreso alcanzado por las mujeres incluso antes de la ca??da del gobierno anterior.

En papel y en las mesas de presupuestos de ayuda extranjera, la igualdad de g??nero fue una prioridad durante dos d??cadas. Hubo mejoras sustanciales para muchas mujeres, en especial para las que hab??an recibido educaci??n y viv??an en ??reas m??s urbanas.

Pero Afganist??n sigue siendo una sociedad profundamente patriarcal. La promesa de los talibanes de regresar a los valores ???tradicionales???, en los que las mujeres est??n subordinadas a sus familiares varones es una oferta atractiva para muchos hombres afganos.Una vitrina vandalizada de un sal??n de belleza en Kabul (Victor J. Blue/The New York Times)

Una vitrina vandalizada de un sal??n de belleza en Kabul (Victor J. Blue/The New York Times)

Alice Evans, investigadora del King???s College de Londres que estudia el progreso econ??mico y social de las mujeres, afirm?? que los derechos de las mujeres est??n limitados por una ???trampa patrilineal???.

Las sociedades en las que la riqueza familiar se mueve por el linaje masculino, tradicionalmente le dan un gran valor a la castidad de las novias, dijo Evans. ???Las ni??as pasan a ser vigiladas de cerca para que mejoren sus posibilidades de matrimonio y el honor de la familia???, dijo, y se desarrollan normas para mantener a las mujeres fuera de la vida p??blica.

La din??mica se refuerza a s?? misma: las familias no quieren arriesgarse a desviarse de las normas sociales, por lo que todos terminan atrapados en un sistema en el que las mujeres tienen que permanecer cerca de sus casas.

Para salir de esa trampa, los salarios de las mujeres tienen que ser lo suficientemente altos como para que los beneficios de trabajar superen los riesgos para el honor familiar, dijo Evans. En Asia oriental, por ejemplo, la r??pida industrializaci??n aument?? los ingresos potenciales de las mujeres, lo que les permiti?? zafarse de las reglas basadas en el honor que las limitaban al hogar.

Eso no sucedi?? en Afganist??n, donde la productividad econ??mica y el empleo languidecieron a pesar del flujo de ayuda. Los salarios de las mujeres no aumentaron lo suficiente en lugares suficientes para superar las preocupaciones sobre el honor de sus familias, o transformar las normas sociales.Combatientes talibanes patrullando en Kabul el mes pasado. Cuando las mujeres y las ni??as desaparecen de las oficinas y las escuelas, se demuestra que los talibanes tienen suficiente poder para redise??ar dr??sticamente los espacios p??blicosCombatientes talibanes patrullando en Kabul el mes pasado. Cuando las mujeres y las ni??as desaparecen de las oficinas y las escuelas, se demuestra que los talibanes tienen suficiente poder para redise??ar dr??sticamente los espacios p??blicos

Pero el empleo femenino s?? logr?? generalizarse lo suficiente como para que muchas familias dependieran de sus ingresos, al menos en parte, dijo Manizha Wafeq, cofundadora y presidenta de la C??mara de Comercio e Industria de Mujeres de Afganist??n.

Esos ingresos se han desvanecido en las ??ltimas semanas como resultado de las restricciones de los talibanes, y eso podr??a afectar la aceptaci??n p??blica de su mandato.

???Ya es una crisis econ??mica para todo el pa??s???, dijo Wafeq. ???La gente est?? buscando la manera de alimentar a sus familias???.

?? The New York Times 2021

Happy
Happy
0 %
Sad
Sad
0 %
Excited
Excited
0 %
Sleepy
Sleepy
0 %
Angry
Angry
0 %
Surprise
Surprise
0 %

Average Rating

5 Star
0%
4 Star
0%
3 Star
0%
2 Star
0%
1 Star
0%

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

six + 3 =