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El 22 de enero, 19 personas, la mayoría migrantes fueron asesinados, autoridades de México vinculan a policías y empleados de su Instituto Nacional de Migración.
Mientras pasan los días, han surgido más detalles de la masacre ocurrida en Tamaulipas, México, donde 19 personas fueron asesinadas y calcinadas. El familiar de una de las víctimas, aseguró que los agentes de la policía mexicana despojaron de sus celulares a los migrantes asesinados.
José Aguilón, viajaba junto con tres familiares hacia Estados Unidos (EE.UU.), él salió dos días antes del grupo que fue víctima de la masacre. Mientras avanzaban, se comunicaban con los que se habían quedado atrás, quienes les indicaron que dejarían de tener comunicación porque la Policía mexicana los detuvo y los estaban despojando de sus celulares.
La revelación se realizó durante una entrevista que Aguilón ofreció al programa Atando Cabos, del Grupo Fórmula, de la periodista mexicana Denise Maerker.
Se desconoce si fueron agentes de la Policía Federal o de la Guardia Nacional, sólo supieron que se trataba de policías. Además, detalló que ellos lograron salvarse porque llevaban dos días de ventaja.
La comunicación con las víctimas fue dos días antes de la masacre. Los celulares también se los retiraron a los “guías” o “coyotes”, detalló Aguilón, quien ya se encuentra en EE.UU., y dijo a Maerker que los teléfonos se los quitaron en San Luis Potosí, pero lograron informarles que ya se encontraban en Tamaulipas, lugar donde perdieron el contacto.
Al principio, las autoridades mexicanas hablaron de un enfrentamiento entre grupos criminales. Con forme pasaron los días, indicaron que uno de los vehículos fue detenido dos meses antes, mientras que ayer martes 2 de febrero se informó que 12 policías fueron detenidos.
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