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Carta del editor
Vivimos en el cuarto país mas vulnerable del planeta susceptible a desastres, en sus 3 clases de amenazas: natural, socio-natural y antropogénica, aun tenemos fresco en nuestras mentes la tragedia del volcán de fuego en 2018, las perdidas materiales de las depresiones tropicales ETA/IOTA y la que estamos viviendo de primera mano la pandemia del COVID19 que ha provocado el fallecimiento de varios compatriotas nuestros, en estos casos existen 3 aspectos que analizaremos a continuación.
- Existen programas de prevención y preparación en gestión integral de riesgos. La respuesta es un rotundo y alarmante NO, antes de entrar de lleno a tocar este punto, vamos a explicar de forma breve que es la gestión integral de riesgos, este proceso que implica 5 componentes en su ciclo de vida son: la prevención, preparación, respuesta, mitigación y rehabilitación, las cuales buscan en cada una de sus fases preparar a la población a para saber que hacer ante una emergencia, que son las primeras dos y la respuesta que es la aplicación de esos conocimientos ante el evento suscitado, luego los últimos dos la mitigación y la rehabilitación buscan generar sistemas de protección y la recuperación de la población ante el desastre. Con esta breve clase de gestión de riesgos, entremos a la pregunta que nos hacíamos al inicio de este párrafo. La respuesta es NO, los gobernantes de nuestro país son expertos en ver como saquean al estado de formas descaradas; desde la creación de la CONRED en el 96, se dió un gran paso para crear una instancia especifica para atender el ciclo de vida de la gestión integral de riesgos, pero desgraciadamente esta institución dista mucho de atender las 5 etapas que mencionamos, puesto que la CONRED esta casi que obligada a la fase de Respuesta porque es allí donde los presidentes saben que pueden robar a manos llenas, en un evento que supera la capacidad de respuesta de la estructura Conred, el gobierno tiene la capacidad de solicitar dinero, recursos, donaciones a manos llenas y utilizarlas a discreción, mientras que las fases de prevención y preparación, que se centran en el fortalecimiento de capacidades no tiene ni el 5% de presupuesto de esta instancia, en cambio respuesta es lo contrario, porque si algo hemos notado, a los gobiernos les gusta vivir del desastre porque pueden promover estados de emergencia, de prevención, de excepción y de calamidad a como ellos mas les convenga, con la finalidad de manejar recursos y destinarlos a empresas, proyectos que lo que menos buscan es apoyar a la población.
- El gobierno realmente busca el bienestar de la población, creo que la respuesta tiene muchos puntos de vista, pero las grandes mayorías vamos a converger que no, y prueba de ello es lo que sucede con el manejo de la actual emergencia de la pandemia COVID19, donde al ingresar el primer caso el 13 de marzo lo primero que hizo el actual mandatario el señor Alejandro Giammattei, fue solicitar recursos a granel efectuando prestamos en montos ridículamente altos, pero que lastimosamente no fueron utilizados para atender la pandemia, vimos médicos sin insumos médicos esenciales, médicos que no tuvieron sueldo por muchos meses, y lo peor de todo se contrataron consultores y empresas proveedoras de insumos afines al grupo del mandatario, recientemente se sacó a la luz publica la compra de 30,000 pruebas para detectar el COVID19 que son falsas a un costo de un millón de dólares, se compraron 3800 patrullas por mas de 100 millones de dólares con prestamos gestionados en pleno inicio de la emergencia, mientras que en otros países ya están vacunando como El Salvador que compró con sus propios fondos vacunas a una farmacéutica, sin esperar el largo proceso del sistema COVAX o Chile que lidera a nivel latinoamericano la vacuna de sus compatriotas, el ministerio de salud de nuestro país tiene la flamante idea de hacer un simulacro de vacunación en el Hospital Roosevelt, para ver como se hará esta campaña en el país. Preguntamos estimado lector, realmente el gobierno nos protege, creo que usted y yo estamos de acuerdo que la respuesta es no, vemos el famoso plan de reactivación económica, y estamos de acuerdo que el país necesita empleo; pero la aprobación del presupuesto general de la nación que tantas manifestaciones generó el año pasado quedó igual con mas del 60% de sus recursos para funcionamiento del fallido aparato estatal y su larga, mafiosa y engorrosa burocracia. Mientras que los escasos recursos destinados para la población, van para obras de gran magnitud, y no estamos en contra de la infraestructura, lo que vemos que no es coherente es que no se destinen a obras de salud y educación, sino que a otro tipo de obras que no son tan necesarias en este momento. Y sale la pregunta que todos nos hacemos, en que se invirtieron todos los prestamos que el gobierno aprobó de forma exprés para atender la pandemia, porque aun no se sabe que se ha hecho con todos esos recursos.
- Estamos preparados para atender otro desastre: la respuesta es NO, con una CONRED debilitada y solo utilizada para atender la respuesta a desastres, tal como el gobierno la utiliza para manejar intereses obscuros y a conveniencia, convirtiéndola en una instancia emergencista y asistencialista que utiliza mecanismos diseñados para obtener donaciones de cualquier tipo de la cooperación internacional para canalizar a unas cuantas y cuestionadas manos la ayuda que ingresa al país, un poder legislativo manejado por un pacto de corruptos que solo beneficia a sus familiares, amigos y financistas mas cercanos en contubernio con el ejecutivo para aprobar leyes a su medida, y finalmente con un sistema educativo y de salud totalmente abandonado, nos damos cuenta que todos los gobiernos viven del desastre porque desgraciadamente roban dinero a cuestas de la vida de nuestros compatriotas, dejando muy claro que lo único que vale para nuestros gobernantes es llenar sus bolsillos y asegurar su futuro, y dejar a su suerte a la gran mayoría de la población.
Para finalizar dejamos esta reflexión, llevamos mas de una semana observando la intensa actividad estromboliana del volcán de Pacaya y esperamos que esta intensa expulsión ígnea, no provoque otro desastre como el del volcán de fuego, por eso estimado lector, es mejor estar prevenido y tener cerca nuestra mochila de las 72 horas, porque en la medida que estemos preparados podremos responder mejor ante una emergencia. Guatemala es un país muy vulnerable, pero tiene un gran tesoro, y es su gente, usted mi estimado amigo, usted que día a día trabaja para llevar sustento a su hogar, usted querido amigo que cuando existe una emergencia desborda su amor hacia el prójimo enviando ayuda al que lo necesita, usted que como yo somos ciudadanos de a pie y queremos ver crecer a nuestros hijos en un país de esperanza y de oportunidades que les permitan soñar y luchar cada día por sacar adelante a nuestra gran nación.
