Carta del Editor
Recientemente salió a luz, el caso de un hospital clandestino que fue clausurado en Quetzaltenango, llama la atención 3 cosas que marcan el accionar de unos matasanos que lo único que buscan es lucrar con la salud de la población.
1.- No todos los profesionales de la medicina tienen como vocación ayudar a sus pacientes, la gran mayoría de buenos médicos entregan su vida por la salud de los enfermos que requieren su asistencia, pero hay otros que son de los que hablaremos en esta carta del editor, como en todas las ramas de la ciencia, hay buenos y malos profesionales, los que terminan afectando a cada gremio, como dice el dicho “justos pagan por pecadores”; en esta ocasión le toco la pelota al gremio de la salud, con un pseudo-hospital abierto de forma clandestina y con el apoyo de la enraizada corrupción que vive este país, lastimosamente tiene involucrados a profesionales de la medicina que atienden el Covid19, estamos inmersos en una pandemia que registra un promedio de cinco mil casos diarios esto de forma oficial, cuando según la estadística indica que el subregistro podría triplicar ese número, con hospitales saturados, falta de medicamentos y un gobierno que ha manejado de la peor forma del mundo la enfermedad. Sale a la luz un caso que indigna a los quetzaltecos, donde destaca que el profesional de occidente aún conserva su vocación de servicio, y por eso aclaramos que unos pocos desprestigian al gremio y llama la atención lo que salió en el diario nacional el Periódico, la clausura de este nosocomio, que no cumplía con ningún registro sanitario y fue aperturado con un solo objetivo, sacarle dinero a los pacientes que desgraciadamente caían en sus garras, el medio de comunicación expone que se cobraba de 20 a 30 mil quetzales diarios, de personas que identificaban tenían recursos y cuando ya no podían pagar los trasladaban al sistema nacional a morir, como si de un objeto se tratara. Esto llora sangre, cuantos hemos sufrido el embate de esta enfermedad, y la hemos superado en casa por el temor de caer al sistema nacional donde todo esta de cabeza, y los buenos médicos que día a día entregan su vida por salvar a cada paciente, sin medicamentos, sin sueldo, y con todo en contra, se topan con doctores que lo único que ven es su bolsillo y la forma de sacar pisto de forma descarada a causas del dolor de la gente.
2.- Uno se imagina que esa clase de practicas solo se ve en el sector público donde la corrupción es el manjar de todos los días de gente sin escrúpulos que lo único que piensan es en robar dinero y llenar sus bolsillos sin velar por el ciudadano que los puso en esos cargos, el articulo expone que el caso salió a luz por el fallecimiento de una madre y su bebe en ese hospital e involucra a personas que en teoría están al frente de la batalla de esta enfermedad, se habla de medicamentos robados a nosocomios nacionales para utilizarlos en ese recinto y como decimos “por el dinero baila el mono”, a cuestas de saber cuántos pacientes cayeron allí por necesidad y por el deseo de ver a su familiar recuperarse y se toparon con unas inmorales que solo buscaban saciar su morbosa sed de dinero, nada duele mas que ver a un familiar enfermo y verlo sufrir, mientras que estos entre comillas profesionales, solo ven su comodidad y llenar sus cuentas con dinero quede saber de cuantas familias con todo el esfuerzo del mundo fueron a regalar a estas personas sin escrúpulos, que no sabemos a ciencia cierta si realmente querían sanar al paciente o su intención era otra, retener o enfermar mas al paciente para incrementar los costos de atención medica del mismo, eso solo las investigaciones lo irán dilucidando. Toda esta historia macabra pareciera ser el guion de una película de terror digna del mejor productor de Hollywood y uno piensa que sucede en otros partes del mundo y no acá en Guatemala y más aún en la segunda ciudad en importancia del país.
3.- Nos preguntamos, cuanto cuesta la vida de una persona, si usted querido lector ha pasado por una enfermedad crónica o complicada uno hace hasta lo imposible por obtener el mejor tratamiento y buscar la forma de conseguir el dinero para pagar esos servicios, pero realmente nos hacen caer en ese circulo vicioso, de pagarle a alguien que ya su modo de vida es un negocio, y no una vocación de ayuda al prójimo, aplaudimos a todos los buenos médicos que día a día entregan su conocimiento y su vida al servicio de la población y repudiamos enérgicamente esa mala praxis de esos personajes que el medio de comunicación sacó a la luz pública y como personas de fe, existe una justicia de la que nadie se escapa y en la que todos rendiremos cuentas, esperemos que reflexionen y vean que el gran don que tienen de salvar vidas es un privilegio que pocas profesiones en el mundo tienen y por ende no la deben destrozar por unos cuantos billetes, por eso estimado lector, utilice doble mascarilla, lávese sus manos de forma frecuente, y sobre todo cuídese el virus está a la vuelta de la esquina, es más contagioso y más peligroso que antes; cuando esas estadísticas se vuelven en un nombre conocido, un vecino, un familiar, la historia cambia, por eso recalcamos CUIDESE querido amigo, VACUNESE acuda al centro de atención más cercano y proteja su tesoro mas valioso, SU FAMILIA, el dinero es efímero, pero LA FAMILIA ES PARA TODA LA VIDA, y sobre todo nuestro pilar donde apoyarnos cuando todo esta mal.