La española María Ángeles Durán asegura ser la dueña del sol y por ello busca cobrar al mundo por su uso.
La psicóloga, escritora y abogada se apropió de la estrella inspirada en una idea que surgió cuando realizaba una investigación para hacer un libro, al descubrir que podía ser propietaria de objetos fuera de la Tierra, en noviembre del 2021 afirmó que quería cobrar a los humanos por beneficiarse de algo de lo que ella es la dueña.
Dennis Hope, un estadounidense pionero en la venta de terrenos extraterrestres, aseguró que encontró un vacío legal para reclamar la propiedad de la luna, ella encontró este caso y decidió reclamar el Sol.
Hope y Durán se basaron en el Tratado del Espacio firmado en 1967, que establece un marco jurídico para los cuerpos celestes, en él se afirma que ningún Estado podrá tener la soberanía sobre ninguno de ellos, sin embargo no hay prohibición para los individuos.
Ante esto la mujer hizo un acta en 2013 donde describe ser “Propietaria del sol, estrella de tipo espectral G2, que se encuentra dentro del sistema solar, situada a una distancia media de la Tierra de unos 149 millones 600 mil kilómetros aproximadamente”.
(Foto: La Voz de Galicia)
Tras afirmar ser la dueña comenzó a vender hectáreas del sol por eBay pero el sitio eliminó su publicación ya que no ofrecía un bien tangible o transportable, ante esto demandó a la empresa por 10 mil dólares. En 2015 ocurrió algo similar pero en contra de ella. Durán fue demandada como propietaria del Sol por los daños que ocasionan los rayos ultravioletas en la piel, aunque ninguna de las demandas prosperaron.
Acerca del cobro por el uso del sol a la raza humana afirmó recientemente: “Conozco la ley y respaldé mi reclamo legalmente. Lo hice, pero cualquiera pudo haberlo hecho. Simplemente, a mí se me ocurrió primero. Cuando tienes una propiedad, tiene sentido hacer uso de ella. Las empresas eléctricas se benefician de los ríos, que son de todos, así que espero aprovechar el Sol”, dijo Durán.
Según ella, de lo que recaude el 50% será para el gobierno español, 20% para un fondo de pensiones de ese país, 10% para la investigación y el 10% a su bolsillo.