Tras la polémica por el pacto AUKUS, Grecia anunció la compra de tres fragatas a Francia, en refuerzo de la “alianza estratégica” entre ambos países de la UE y la OTAN, reflejada ante Turquía en el Mediterráneo oriental.
El presidente francés, Emmanuel Macron, y el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, firmaron este martes un contrato sobre la compra por Grecia de tres fragatas, un refuerzo de la “asociación estratégica” entre ambos países de la Unión Europea (UE) y la OTAN.
Tras una reunión en el Elíseo, sede de la presidencia francesa, Mitsotakis precisó en rueda de prensa que existe una opción de compra de una cuarta fragata Belharra en este acuerdo, que responde “a las necesidades de la marina griega”.
Macron subrayó, por su parte, la “calidad de la oferta francesa”, como muestra la firma de este contrato, semanas después de que Australia anulara la adquisición de submarinos franceses por 55.000 millones de euros (unos 64.000 millones de dólares).
Canberra tomó esta decisión al adherirse a una alianza estratégica con Estados Unidos y el Reino Unido en el Indopacífico, que desencadenó una inédita crisis diplomática a ambos lados del Atlántico. París llamó a consultas a su embajador en Washington.
“Sin contradicción” con las relaciones con EE. UU.
El presidente francés, que la semana pasada conversó con su par estadounidense Joe Biden para rebajar la tensión, recordó que el embajador francés volverá a Washington en las próximas horas y reiteró el apego de su país a la zona del Indopacífico.
Esa alianza bautizada AUKUS “no modifica la estrategia indopacífica de Francia”, indicó este martes Macron, recordando que cuentan con “varios socios en la región” como India y con un millón de ciudadanos y más de 8.000 soldados desplegados.
Las fragatas de tipo Belharra las fabricará la compañía estatal francesa Naval Group en los astilleros del puerto de Lorient, en Bretaña. El valor del contrato según lo avanzado por la prensa, se sitúa en una horquilla de entre 3.000 y 5.000 millones de euros.
Para Naval Group supone un respiro después del revés por la anulación de un megacontrato de unos 56.000 millones de euros por la venta de submarinos convencionales a Australia, que finalmente ha decidido comprar submarinos nucleares a Estados Unidos.
Esta compra por Grecia de tres fragatas se produce, además, tras el anuncio a inicios de mes de la adquisición por Atenas de seis cazas de fabricación francesa Rafale, que se suman a un millonario contrato precedente para hacerse con 12 de estos aviones.
El programa armamentístico griego, en pleno desarrollo, busca frenar las provocaciones de Turquía en el Mediterráneo Oriental. Francia es uno de los pocos países de la UE que alzó la voz en los últimos meses y envió incluso buques y cazas en 2020 para apoyar a Atenas.
No obstante, Mitsotakis se esforzó en subrayar que la adquisición de las fragatas a Francia no está en contradicción con sus relaciones con Estados Unidos, y que en la práctica esto viene a reforzar la flota griega “en la OTAN”.
“Hacia la autonomía estratégica europea”
Aseguró que si se habían decantado por la opción francesa es porque respondía a las necesidades que había planteado en su licitación, y también porque Francia se ha comprometido a entregas anticipadas.
Además, Mitsotakis recordó que “Francia nos ha apoyado en momentos difíciles”, una alusión evidente al despliegue naval francés ante el desafío que planteó Turquía el verano del pasado año, en torno a las aguas jurisdiccionales de Grecia.
Macron también se refirió a ese episodio y negó que la venta a Grecia de estas fragatas vaya a contribuir a una escalada de tensión con Turquía en las aguas que Ankara disputa a Atenas.
El presidente francés señaló que no le parecía que el pasado año “fuera Grecia la que se mostró belicosa en el Mediterráneo oriental”. Dijo que los franceses se mostraron entonces “solidarios” y que también “es legítimo” ayudar a que el país se equipe militarmente y comprometerse a protegerle.
“Los europeos deben dejar de ser ingenuos”, añadió Macron, que volvió a defender “la autonomía estratégica europea” ante el repliegue que dice constatar desde hace más de diez años de Estados Unidos en dirección de Asia ante el desafío que representa China para su papel allí.
De acuerdo con el jefe del Estado francés, el acuerdo con Grecia “contribuye a proteger la seguridad, la soberanía, la independencia y la integridad territorial de nuestros dos Estados al tiempo que promueve la seguridad, la estabilidad y la prosperidad en regiones de interés común”.
rml (efe, afp)