Todo esto sucedió cuando yo tenía unos 10 años talvez allá por el año 92, estaba estudiando 3ro. Básico en un instituto nacional que se ubica a la par del hospital nacional, esta residencia se ubicaba por la 24 avenida de la zona 3, de Quetzaltenango(Xela), frente al salón comunal de la colonia Minerva, hoy existen unos edificios de locales comerciales y una venta de comida mexicana, fue la primera noche que pasamos en esa casa, esa se convirtió en el inicio de los 4 peores años de mi vida. Porque vi cada cosa que solo comprendí cuando nos cambiamos de casa que mi mama nos contó de un echo que se suscito allí, pero de eso les contaré al final.
Todo comenzó cuando nos mudamos a esa casa, yo llegué en el primer camión de la mudanza junto con mi hermano pequeño, que nos quedamos cuidando en lo que mis hermanos más grandes ayudaban a los señores de los camiones a descargar muebles y cajas con libros, ropa y otros accesorios que iban embalados, en ese rato eran como las 8 de la mañana, cuando abrieron la puerta, sentimos un frio bien peculiar, pero como era una casa colonial no le pusimos atención, entramos y con mi hermanito nos fuimos a conocer cada uno de los cuartos de la casa, como a las dos horas terminaron de descargar los camiones y se fueron por otros tres viajes más, entonces nos quedamos con mi hermano esperando a que todos llegaran con mas cosas, entonces nos quedamos solos y seguimos explorando la casa, fuimos a todos los cuartos y había una habitación que tenia llave y en los años que vivimos en esa casa nunca pudimos entrar, porque supuestamente allí guardaban cosas el dueño de esa residencia, que por cierto nosotros rentamos por ese lapso de tiempo, como estábamos solitos nos dio curiosidad ver que había en cada una de esas habitaciones, y seguimos viendo cuando de repente pummmm un estruendo fuerte que gritamos de la sorpresa porque sonó fuerte nosotros estábamos en el patio y corriendo fuimos a ver que puerta había sido y si había llegado alguien a la casa y era la puerta de la cocina con el comedor, que cerró sin que nadie la empujara, como les contaba no había nada porque nos estábamos mudando, pero como fue de día pensamos que era algún ventarrón que entró a la sala, y seguimos jugando, en todo eso llegó la hora del almuerzo y nos llevaron comida y llegaron con mas muebles, entonces almorzamos y seguían bajando cosas.
Después de las 2 de la tarde talvez se fueron de nuevo para ir a traer más muebles, nos quedamos nuevamente solos y seguimos jugando en la casa, de nuevo pummmmm otra puerta, y esta vez no fue la cocina, fue uno de los dormitorios el mismo estruendo, allí solo habían unas cajas que acaban de poner los de la mudanza, y por el ruido y por ser de día no le pusimos atención, a las dos horas regresaron de nuevo con otro viaje de mudanzas, eran cerca de las 6, cuando mi hermano pequeño que tenia dos años menos que yo, se fue con mi papa a comprar la cena, entonces me quedé solito en esa casa ya habían cajas y muebles por todos lados, entonces me quede sentado en la sala sobre un sofá que tenía unos libros y me puse a leer en lo que llegaban todos de nuevo con el ultimo viaje, ya estaba obscuro, cuando las cosas se pusieron mas raras. Y comenzó con el frio que en todo el día no cambió y no era cualquier clase de frio; porque te erizaba la piel y te daba escalofríos, lo mas raro era cuando pasábamos por esa puerta que no se habría que se sentía mas pesado y tenebroso.
Eran cerca de las 8 de la noche cuando en esa puerta escuche tres golpes, como si alguien estuviera tocando la puerta pero el sonido provenía de adentro, como estaba concentrado en el libro y estaba solito, no había ningún ruido, la tv, y el radio viejo que tenia mi papa no estaba conectado, que bien podía escuchar cuando algo se caía, y esos tres golpes llamaron rápido mi atención, porque dije talvez se cayo algo, me levante a ver a ese cuarto, la casa tenia la sala en la entrada y la cocina y comedor colindaban con ese cuarto que estaba cerrado, tenia dos grandes patios y como era colonial varios cuartos estaban a la par del patio de enfrente. Cuando me levanté a revisar el frio se intensificó un intensificó escalofrío recorrió todo mi cuerpo hasta donde la espalda cambia de nombre, y toda mi piel se erizo, cuando me acerque a ese cuarto, vi que una sombra negra como un vapor paso frente a la puerta y nuevamente se escucharon los tres golpes como cuando tocan con el puño, y me asusté sentí mi cuerpo bien pesado y la piel bien erizada que no pude dar un paso, cuando eso paso, logré moverme y me fui corriendo a la sala a esperar que mis papas y mis hermanos regresaran. Como a la media hora llegaron todos con la cena y me vieron todo pálido y me preguntaron que tenía y les conté lo que me había sucedido, tanto que todos me dijeron tu hambre tienes y no le pusieron atención, entonces cenamos con todos y medio arreglamos las camas para descansar y seguir arreglando y pasando más cosas al otro día.
Eran cerca de la media noche que todos nos fuimos a descansar, y yo me quedé en mi cuarto solo, con un montón de cajas y mi cama en un esquina. Me puse mi pijama y fui a dormir, cuando a las tres de la mañana escuché dos ruidos que me despertaron, y el primero fue el de una silla de madera que parecía que estaban como arrastrando en el cuarto, y dije que raro si acá no tengo sillas solo un montón de cajas de cartón con cosas, y no pensé deplano siguen arreglando mis hermanos o mi papa, entonces seguí me di la vuelta y seguí durmiendo a los 5 minutos, escuché frente a mi puerta los tres golpes de nuevo como si alguien tocara y me entró un escalofrío penunbral, y me senté en mi cama y me disponía a ir abrir, grité quien es, entren estoy despierto, y nadie respondió, y la piel se me erizó mas fuerte, y los escalofríos no paraban, cuando comienzo a escuchar el llanto de un bebe de meses, y bien escuché como ese llanto de dolor y tristeza atravesó la puerta y se hizo más intenso, a todo esto no les había dicho que estaba a obscuras, y cuando escuché eso comencé a rezar y rápido me levanté a encender la luz, y de repente todo se quedó en silencio, eran talvez las tres y media de la mañana, apagué de nuevo la luz y me fui a recostar con el miedo que recorría cada centímetro de mi cuerpo, cuando apagué la luz y me recosté escuché nuevamente los tres golpes en la puerta y pummmm el golpe fuerte de una puerta que se habría, y sentí mi cuerpo bien pesado quería gritar y no podía, tenia el cuerpo bien erizado, con escalofríos sin parar, cuando logro sacar la cabeza de la colcha veo una sombra negra a la par de mi cama y comienzo a gritar fuerte, y en un ratito la sombra desapareció y corriendo llegaron mis papas y mis hermanos a ver que había pasado, y rápido encendieron la luz y me dijeron que tienes, y les conté que había escuchado que arrastraban sillas, que me habían tocado la puerta tres veces, el llanto de un bebe, la puerta que se había abierto y la sombra a la par de mi cama. Ellos se quedaron atónitos y no me dijeron nada.
Esa noche no pude pegar los ojos y me quedé con mis papas a dormir, pero nadie me dijo nada, al día siguiente en el desayuno, todos hicieron como si nada había pasado, ese día nuevamente me tocó quedarme solo en el día, pero ya estaban mis hermanos arreglando y por el teje y maneje de cosas, se escuchaban ruidos por todos lados. Por lo que pensé que había sido algo que soñé, en la noche nuevamente me quede dormido como a las 10 de la noche, y nuevamente a las 3 de la mañana el frio fuerte, comenzaron los escalofríos, cuando sentí que alguien me tomaba del pie, y pego el grito cuando siento que me jalan la colcha y esta se cae al piso, comienzo a gritar fuerte que corriendo llegaron mis papas a ver que tenía. Les conté lo que me había sucedido ellos no dijeron nada y se quedaron conmigo esa noche.
Al día siguiente cuando me fui a bañar me di cuenta que en mi pie donde sentí que me habían agarrado la noche anterior la tenia morada y me asusté. Y cuando salí del baño le conté a mis papas y ellos nuevamente se miraron y no dijeron nada. Eso fue así por los siguientes 4 años, en las siguientes historias les seguiré contando que mas cosas raras vimos en esa casa, situaciones tan espeluznantes que marcaron el resto de mi vida, lo que no les conté fue que cuando nos mudamos de esa casa lúgubre, fría y tenebrosa, la vecina que era amiga de mi mamá, le preguntó si nunca habíamos visto nada raro en esa casa, y mamá reservándose todo lo que habíamos visto allí dijo, no nada raro y porque pregunta, y la vecina es que en esa casa hay un cuarto que está cerrado con llave, y ella dijo si efectivamente así es, es que allí apareció muerto un joven, que decía que escuchaba y miraba cosas y nadie nunca supo que paso realmente, tanto así que la casa estuvo abandonada por casi 10 años porque nadie aguataba mas de un mes viviendo allí, y nosotros éramos la primera familia que había aguantado tanto tiempo viviendo allí, porque algo no les mencioné los vecinos cuando llegaban de visita nunca se animaron a entrar, todos se quedaban en la puerta, y decían que cuando la casa estaba deshabitada, escuchaban como movían muebles y la casa estaba vacía, se escuchaban gritos, y cuando pasaban frente a la puerta de la calle muchas mencionaron que les tocaban tres veces la puerta, como si alguien quisiera salir.
Hoy que tengo 39 años y soy un profesional, cuando recuerdo todas las cosas que mi familia vivió en esa casa que tenía más de 100 años y como contaban las experiencias de esa casa embrujada, se me eriza la piel como esa primera noche de terror, que jamás olvidaré
Jorge Barrios / Aporte