El 5G ya es una realidad en Europa como en el caso de España. Basta con echar un vistazo a la red de datos de tu teléfono móvil, si dispone de un módem adaptado, y estar dentro del área de influencia de la red para comprobar que su implementación poco a poco va creciendo. Ya incluso ha escapado de las grandes capitales, zonas rurales se encuentran ya bajo el manto de 5G.
Mucho se ha hablado sobre esta tecnología, sobre todo con connotaciones negativas. La crisis provocada por el coronavirus ha dado lugar a hipótesis plenamente absurdas. La más extendida, que las vacunas contra el COVID llevan incluido un chip que permitiría el control mental de los individuos. Algo que obviamente no se sostiene y que carece de credibilidad.
Pero si nos centramos en lo que nos interesa, la conectividad 5G está permitiendo funcionar a una velocidad diferente, mucho mayor, posibilitando que los tiempos de espera se acorten. Pero no solo queda aquí la ventaja evidente de la velocidad, sino que por otro lado, el 5G dispone de una cantidad de aplicaciones útiles que pueden incluso salvar vidas de manera remota.
¿Qué es el 5G?
Una red de comunicaciones de última generación que viene a ampliar a la implementada hace una década y que proporcionaba banda ancha móvil, la de 4G. Los diferentes operadores de telefonía han comenzado a implementar esta red, si bien fue la británica Vodafone la primera en empezar a desarrollar su red.
La principal ventaja de la tecnología 5G es la que más llama la atención, la de la velocidad. Supera ampliamente a las actuales redes de fibra óptica, ya que proporciona una velocidad de hasta 10 GBps, lo que permite que puedas acceder a contenidos digitales en alta calidad sin ningún tipo de interrupción. Parece que, por fin, el error de buffering va a comenzar a ser parte del pasado. De esta manera, podríamos disfrutar además de videollamadas, prácticamente, tiempo real. La situación de pandemia ha puesto de manifiesto la importancia de unas comunicaciones fluidas para poder teletrabajar.
La latencia, o tiempo de espera del servidor, es ahora prácticamente imperceptible gracias al 5G. Y si vamos más allá de tener un teléfono entre las manos, podremos comprobar su utilidad en un futuro próximo. Gracias a esta reducción será posible que las comunicaciones entre un coche autónomo y los centros de gestión de tráfico sea también en tiempo real. Permitirá que, en situaciones complejas de conducción en ciudad, el vehículo reciba rápidamente cualquier incidencia y valore las opciones a tomar. Será imposible que cuando no conduces tú el coche se salte un semáforo en rojo.
Dentro del ámbito doméstico, permitirá tener más dispositivos conectados sin que esto afecte a la calidad de las comunicaciones. Es evidente que cada vez más, los hogares inteligentes que hacen uso de la domótica necesitan de redes muy rápidas para poder ofrecer una respuesta competitiva. El IoT se abre paso de forma agigantada. Se estima que el 5G será capaz, en cuanto esté a pleno rendimiento, de dar soporte a 1 millón de dispositivos conectados por cada kilómetro cuadrado.
Salvar vidas a distancia
Lo realmente llamativo es como esta tecnología puede salvar vidas. Es capaz de disponer de su rapidez y ausencia de latencia para practicar intervenciones quirúrgicas de forma remota. El ejemplo se dio el año pasado con un cirujano que se encontraba en Londres y cuyo paciente era un plátano y que estaba en un quirófano de California. El galeno consiguió realizar una sutura en tiempo real. Si imaginamos las posibilidades de salvar vidas en poco tiempo y sin que un equipo médico especializado deba desplazarse, comprenderemos la utilidad del 5G.
Y salvar vidas es algo que se puede realizar de diversas formas, una de ellas es con la lucha contra el fuego. Drones equipados con esta tecnología podrán enviar datos georreferenciados, así como mapas de calor y la propia disposición del equipo humano que se encuentra al frente de un incendio. Se reducirán los tiempos de espera y se podría atajar un incendio de forma más rápida.
El día a día con tu dispositivo móvil
Si dispones de un dispositivo móvil con tecnología 5G, habrás comprobado una mejora en la velocidad de las conexiones a internet. Aunque de momento las bandas asignadas no son todo lo rápidas que se espera de ellas, el cambio es evidente. La transmisión de voz también experimenta una mejora. De esta forma, es posible experimentar un mejor calidad de las comunicaciones. Otro de los efectos asociados es que la batería de nuestros dispositivos puede dar como resultado una gestión más eficiente de su consumo.
La velocidad de las redes 5G permite ya que los juegos online en versión multijugador puedan desarrollarse sin interrupciones, y proporcionando una experiencia hasta ahora nunca vista. Pero esta nueva versión de la banda ancha dispone de muchas posibilidades que, tal y como hemos visto, no tienen que ver con el ocio. No es posible ya una vuelta atrás.
La revolución del 5G no ha hecho más que comenzar y se trata de un fenómeno imparable. A pesar de las críticas vertidas por algunas organizaciones y amigos de hipótesis enrevesadas, no ha quedado demostrado que esta tecnología sea nociva para la salud ni que provoque el desarrollo de algunas enfermedades. El 5G ya está aquí para darnos un nuevo mundo de posibilidades.
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