Los gobiernos de Ucrania y de Polonia criticaron este jueves el acuerdo alcanzado entre Washington y Berlin para completar el polémico gasoducto ruso Nord Stream 2, al considerarlo “insuficiente” para reducir las amenazas que crea el proyecto.
“Desafortunadamente, las propuestas hasta ahora para cubrir el déficit de seguridad resultante no pueden considerarse suficientes para limitar efectivamente las amenazas creadas por el Nord Stream 2”, señalan en una declaración conjunta los ministros de Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, y de Polonia Zbigniew Rau.
“Pedimos a Estados Unidos y Alemania que aborden adecuadamente la crisis de seguridad en nuestra región, de la que Rusia es el único beneficiario”, añaden.
Kiev y Varsovia prometen trabajar junto con sus aliados y socios para oponerse al gasoducto “hasta que se desarrollen soluciones para abordar la crisis de seguridad creada por el Nord Stream 2, brindar apoyo a los países que aspiran a ser miembros de las instituciones democráticas occidentales y reducir las amenazas a la paz y la seguridad energética”.
Ucrania y Polonia sostienen que la decisión en 2015 de construir Nord Stream 2, que transportará gas ruso a Alemania por el fondo del mar Báltico, pocos meses después de la invasión rusa y la anexión ilegal de Crimea, creó una crisis de seguridad, credibilidad y política en Europa, que no se ha solucionado con el acuerdo.
“Actualmente, esta crisis se profundiza significativamente por la renuncia a los intentos de detener el lanzamiento del gasoducto Nord Stream 2”, sostienen.
“Esta decisión ha creado una amenaza política, militar y energética para Ucrania y Europa central, al tiempo que aumenta el potencial de Rusia para desestabilizar la situación de seguridad en Europa, perpetuando las divisiones entre los Estados miembros de la OTAN y la Unión Europea (UE)”, agregan Ucrania y Polonia.
Promover la aprobación de sanciones contra Rusia
Los dos países consideran que “cada intento creíble de cubrir el déficit de seguridad debe tener en cuenta sus consecuencias negativas en tres áreas: política, militar y energética”.
Además, creen que hay que implicarles en las negociaciones.
“Dicho intento tendrá también una dimensión democrática, que asume conversaciones con los gobiernos de los países más afectados por los efectos negativos del Nord Stream 2 en la etapa de consecución de un acuerdo”, concluyen Kiev y Varsovia.
Estados Unidos y Alemania han llegado a un acuerdo por el que Washington permitirá que se complete el gasoducto, a cambio de ayuda de Berlín para proteger el suministro energético de Ucrania.
El punto más importante del acuerdo es el compromiso de Alemania de promover la aprobación de sanciones contra Rusia en el marco de la UE, en caso de que Moscú intentara “usar la energía como un arma” o cometiera “nuevos actos agresivos contra Ucrania”.
Alemania se compromete además a ayudar a Ucrania a negociar “una extensión de hasta 10 años” de sus contratos para el tránsito de gas con Rusia, que expiran en 2024.
El Gobierno alemán nombrará incluso un enviado especial para llevar a cabo esas negociaciones.
Alemania se compromete asimismo a “establecer y administrar un Fondo Verde para Ucrania” que apoyará la transición energética a fuentes más limpias en el país europeo.
Alemania donará inicialmente al fondo al menos 175 millones de dólares (casi 150 millones de euros) y tanto Washington como Berlín se comprometen a promover inversiones en ese proyecto de “al menos 1.000 millones” de dólares” (847 millones de euros), incluidas algunas del sector privado.
mg (efe, afp)