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El n??mero total de aterrizajes en el pa??s baj?? en 2021 en relaci??n con el primer semestre de 2020, pero en Pet??n se mantiene la incidencia de a??os anteriores. Seg??n el Ej??rcito, visores nocturnos y seguridad en tierra ha permitido desviar vuelos a pa??ses vecinos.
Un??kilo de coca??na es ingresado a Pet??n cada dos horas, en promedio. Es lo mismo que dura un partido de f??tbol, con tiempos extras. Y esto solo estimado con base en los decomisos de droga que reportan la??Polic??a Nacional Civil??(PNC), el??Ministerio P??blico??y el??Ministerio de la Defensa??(Mindef); la cifra es mayor si se toma en cuenta que hay m??s vuelos que logran aterrizar sin ser incautados.
Como referencia, si seg??n el Departamento de Estado de los EE.UU., el 90% de la coca??na que se incauta en su territorio pas?? por Guatemala, entonces solo en el primer trimestre de 2021 por suelo guatemalteco pasaron al menos 18 mil kilos (de 20 mil incautados en EE.UU.). En el mismo lapso, Guatemala solo llevaba decomisados 642 kilos, seg??n registros oficiales.
De once aterrizajes en Pet??n, las autoridades reportan incautaci??n de droga solo de cuatro (36% de los casos). Eso significa que por cada uno de los otros siete aterrizajes sin incautaciones, los narcotraficantes por lo menos cargaron con una tonelada de coca??na. La capacidad de carga de las avionetas oscila entre los 600 y mil kilos y alcanza hasta los 2,500 kilos en los jets.
Entre enero y mayo, en Pet??n, aterrizaron siete avionetas, y cuatro jets. En tres avionetas, las autoridades incautaron 142, 230 y 1,056 kilos, y otros 401 kilos s??lo en uno de los jets. Las cifras significan que los traficantes se llevaron la mayor??a de la droga, o toda, antes que llegaran la PNC y personal militar. Por eso los traficantes prefieren Pet??n; los remotos sitios de aterrizaje les permiten huir con la mayor parte o todo el cargamento y evadir capturas.
???Los traficantes siempre buscan lugares aislados para los aterrizajes, con poca presencia del gobierno, y donde pueden comprar o amenazar a las autoridades locales, si hay???, dice Michael Vigil, exagente de la Agencia Antidrogas de EE.UU., o DEA (por sus siglas en ingl??s). ???Es una forma de proteger su inversi??n (y sus ganancias), porque los compradores mexicanos deben adelantar hasta la mitad del costo del cargamento???.
Seg??n Vigil, el costo del transporte de la droga cubre con creces el costo de las aeronaves que los traficantes abandonan despu??s de descargar la coca??na. S??lo en un par de casos, seg??n informaci??n del MP y el Mindef, y autoridades mexicanas, se identificaron un par de jets que fueron robados en M??xico en 2020, piloteados hasta Venezuela y cargados con drogas para despu??s volar hacia Guatemala. El exagente de la DEA agrega que los narcos utilizan los jets porque son m??s veloces y permiten transportar una carga mayor.
??Por qu?? Pet??n es hub?
La Brigada Especial de Operaciones de la Selva se compone de 600 soldados para patrullar la mitad de Pet??n, las fronteras, preservar la Bi??sfera Maya, y luchar contra el crimen organizado transnacional, seg??n el coronel Rub??n T??llez, vocero del Mindef. El batall??n cubre 18 mil kil??metros cuadrados en Pet??n. Es decir, hay soldado por cada 30 kil??metros cuadrados, o el equivalente a 4,200 campos de f??tbol. Cubrir toda la zona, a pie o en veh??culo, es humanamente imposible. Por eso Pet??n es un hub del narcotr??fico a??reo, y hay rutas para el trasiego de drogas que atraviesan ??reas protegidas en ese y otros departamentos, de acuerdo con datos del Consejo Nacional de ??reas Protegidas (Conap) y el Mindef.
En Pet??n ocurri?? el 48% de los aterrizajes vinculados al narcotr??fico en 2019 y 2020. Este a??o, el dato se elev?? al 85%, y el porcentaje restante s??lo comprende dos casos m??s, uno en Izabal y otro en Escuintla. De esa cuenta, Pet??n mantiene el ritmo de aterrizajes de los ??ltimos dos a??os, aunque a nivel nacional se redujo el n??mero de las incautaciones de coca??na transportada por v??a a??rea de un 83% al 49%. La droga traficada por mar compone el resto de los decomisos, salvo menos del 1% que fue ingresada al pa??s por v??a terrestre. Estos porcentajes s??lo son una gu??a, porque la droga incautada en Guatemala no supera la d??cima parte de la coca??na trasegada por el pa??s que s?? llega hasta EE.UU.
No hay forma de saber c??mo se trasiega v??a Guatemala la droga que no es incautada. Los aterrizajes despu??s de los cuales los narcotraficantes logran huir con cargamentos completos s??lo son una pauta.
Nueva tecnolog??a para viejas desventajas
La dificultad para llegar con rapidez a las zonas de aterrizaje, seg??n T??llez, y el control que los narcotraficantes ejercen en poblaciones remotas en ??reas rurales, para bloquear el paso de las autoridades, les permiten descargar la aeronave y huir con la droga sin ser capturados. Lo consiguen en siete de cada diez casos. T??llez se??ala que al personal militar y policial puede llevarles varias horas para llegar a un sitio de aterrizaje, despu??s que los radares de la Fuerza A??rea detectan la aeronave, a??n si el personal en tierra se moviliza en veh??culo. Mientras tanto, seg??n Vigil, los traficantes ???pueden descargar una aeronave hasta en ocho minutos???.
T??llez explica que, una vez que se intercepta el vuelo, deben observar el trayecto para determinar el sitio de aterrizaje y enviar personal de tierra, porque la aeronave puede ingresar sobre Izabal, dirigirse a la costa sur, y despu??s desplazarse hacia Pet??n, o ingresar por el norte y luego aterrizar en la costa sur.
La Fuerza A??rea tiene cuatro helic??pteros que no usaba para seguir las aeronaves debido a la falta de visibilidad porque las aeronaves ingresan de noche o madrugada. Sin embargo, el vocero militar inform?? que este a??o el Ej??rcito adquiri?? equipo de visi??n nocturna para utilizar con los helic??pteros. ???Esto nos ha permitido hacer seguimiento y algunas incautaciones, pero tiene limitantes porque un helic??ptero no es tan veloz como un jet, y tambi??n est?? la capacidad de transporte de personal???, explic?? T??llez.
Los visores nocturnos permiten ubicar el lugar de aterrizaje, despu??s de observar la trayectoria del vuelo, y asegurar la zona antes de que la poblaci??n local impida el acceso por tierra para evitar incautaciones y capturas, como ha ocurrido en varios casos este a??o en Pet??n. Seg??n T??llez, el equipo tambi??n les ha permitido observar los lugares donde, desde las aeronaves, lanzan la droga a tierra antes del aterrizaje, que luego incautan unidades de patrullaje terrestre. Pero los visores nocturnos tienen una desventaja: la lluvia anula su capacidad de visibilidad.
Una reducci??n en el n??mero de aterrizajes a nivel nacional podr??a obedecer a que, seg??n T??llez, tambi??n han ubicado personal militar en las pistas donde se sospecha que aterrizar?? la aeronave. Con frecuencia, los traficantes eligen los mismos municipios. Este a??o en Pet??n, por ejemplo, cuatro aeronaves aterrizaron en Sayaxch??; tres, en La Libertad, y otras tres, en San Andr??s. El vocero militar afirma que, este a??o, al menos 25 avionetas o jets abandonaron el espacio a??reo guatemalteco al no tener d??nde aterrizar. ???Por lo general, se desplazan despu??s a Belice, Honduras o M??xico cuando no logran aterrizar en Guatemala???, revel??.
Las cifras a nivel nacional muestran que hubo 13 aterrizajes entre enero y el 15 de junio pasado, contra 19 en el primer semestre de 2020. No obstante, la incidencia de aterrizajes en Pet??n se mantiene. Pas?? de ser el destino de los vuelos en la mitad de los casos el a??o pasado (20 de 39) a ser el punto de destino en la mayor??a en 2021 (11 de 13).????
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