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Seis personas demandaron a la empresa responsable del accidente nuclear de Fukushima (Japón), que tuvo lugar en 2011, alegando que desarrollaron cáncer de tiroides como resultado de la exposición a la radiación. Se trata de una reclamación colectiva planeada para ser presentada este jueves y con la cual se busca una compensación estimada en 5,4 millones de dólares, aseguró el abogado principal del pleito a la agencia AFP.
Los querellantes —actualmente con edades entre los 17 y los 27 años— vivían cuando eran niños cerca de la central nuclear, operada por Tokyo Electric Power Company (TEPCO), cuando la instalación sufrió graves daños por un terremoto y un posterior tsunami. Todos ellos fueron diagnosticados con la enfermedad entre 2012 y 2018. A dos les extrajeron un lado de la tiroides, mientras que a los restantes les fue extirpada por completo y están obligados a tomar medicamentos hormonales de por vida.
La demanda se ha convertido en la primera colectiva contra TEPCO por problemas de salud relacionados con el desastre de Fukushima. Es probable que establecer un vínculo sólido entre el cáncer de tiroides y el accidente se convierta en el punto central del caso, ya que un equipo de expertos, previamente establecido por el gobierno regional, no reconoció ninguna relación entre ambos. Al mismo tiempo, está bien demostrado que la exposición a radiación es un factor de riesgo en el desarrollo de este y otros tipos de cáncer.
Desde el momento del desastre, la prefectura de Fukushima ha realizado pruebas de detección de cáncer de tiroides infantil en cerca de 380.000 personas que tenían menos de 18 años en ese entonces. Como resultado, hasta junio de 2021, 266 individuos han sido diagnosticados o se sospecha que tienen la enfermedad.
El equipo legal de la parte demandante argumenta que dichas tasas son significativamente más altas que las habituales para esa dolencia. Sin embargo, las autoridades regionales y los expertos arguyen que las inusuales cifras se deben a mejores diagnósticos.
Entre tanto, un portavoz de TEPCO reiteró sus disculpas por los “problemas y preocupaciones” derivados del accidente y afirmó que la empresa abordará “con sinceridad” la demanda y prestará atención a “los detalles y reclamos”.
