Ser feliz es una meta a la que todos queremos llegar, pero tenemos diferentes ideas sobre cómo conseguirla. Es fácil pensar en la felicidad como un resultado, pero aprender a sentirnos bien a pesar de las circunstancias es clave para mantener un estilo de vida saludable.
Es verdad que a veces las circunstancias pueden no ser las más favorables para sentirte bien, sin embargo hay ciertas acciones que sí podemos poner en práctica para mejoran nuestra actitud ante la vida.
En este artículo encuentras 10 pequeñas acciones que te ayudan a ser más feliz y sentirte bien todos los días. ¡Empieza hoy a remodelar tu interior y exterior!
¿Qué es la felicidad?
La felicidad es una palabra compleja y difícil de definir, sobre todo porque el camino a la felicidad es diferente para cada uno de nosotros.
Yo no soy psicóloga y por lo tanto me di a la tarea de investigar a profundidad el tema.
Es verdad que algunos de los factores que afectan la felicidad pueden estar fuera de nuestro control (como la genética o determinadas circunstancias). Pero siempre hay acciones que podemos tomar a partir de este momento para amplificar nuestros buenos sentimientos.
La psicóloga experta en felicidad Mónica López comenta en una entrevista que le hice lo siguiente: la felicidad consiste en ir tomando día a día pequeñas decisiones, que se traducen en acciones para vivir más feliz.
Ser feliz es sentirte bien, funcionar bien y hacer el bien
Según la experta, actuar de forma coherente con nuestro valores y metas personales, nos permite tomar estas pequeñas acciones respecto a nuestra felicidad y, de esta forma tener una combinación de emociones más positivas que negativas.
¿Qué puedo hacer para decidir ser feliz ?
Las personas felices se dan cuenta de que la felicidad se convierte en un hábito. No son víctimas de las circunstancias. Tampoco persiguen esa “felicidad” en alguna persona o un bien material.
Es cierto que, algunos días puedes sentirte mejor que otros (tal vez te afecte el clima o alguna fecha en particular) pero si en el cómputo total de días al año decides sentirte bien y feliz, estas en el buen camino.
Aunque suene imposible, tú puedes tomar el control para sonreír más veces al día y estar más satisfecho con la vida.
Estas pequeñas acciones se dividen en dos partes:
- Pequeñas acciones que mejoran nuestra percepción y relación con el mundo exterior
- Pequeñas acciones que provienen dentro de nosotros y mejoran nuestra actitud ante la vida
Trata de introducir cualquiera (o todas) de estas acciones en tu rutina. Así aseguramos de que te sientas mejor y seas más feliz ¡por dentro y por fuera!
Acciones para ser feliz de afuera hacia adentro
1.- Ponte en contacto con la naturaleza
¿Recuerdas ese día nostálgico cuando saliste a dar un paseo?… seguramente te sentiste mejor después de hacerlo.
Está comprobado que vivir cerca de espacios verdes o tener contacto con la naturaleza, se asocia con una mejor salud mental.
Simplemente porque la conexión con otros seres vivos tiene un impacto positivo en tu sensación de bienestar 1
Es tan fuerte el estímulo, que el solo mirar algunas imágenes de naturaleza, puede estimular partes del cerebro que se asocian con la felicidad 2
Además, pasar tiempo en el aire libre nos expone a la luz solar, lo que ayuda que absorbamos mejor la vitamina D. Se ha visto que los bajos niveles de esta vitamina (hormona) se relaciona con mayor depresión 3.
Sal a dar más paseos y ¡no te olvides de usar protector solar!
Lo que puedes hacer hoy:
- Bájate dos paradas antes del metro o estaciona el auto más lejos para que pases más tiempo al aire libre.
- Organiza una excursión en el campo o un picnic en el parque el fin de semana y convive con la naturaleza, notarás la diferencia enseguida.
2.- Cuida tu cuerpo haciendo ejercicio
Si piensas que hacer ejercicio se trata únicamente de construir tus músculos, te equivocas.
Se ha comprobado que el hábito del ejercicio promueve la felicidad a largo plazo 4
Además la actividad física tiene múltiples beneficios para tu salud en general y para tu salud mental. Esto son solo algunas maravillas que el ejercicio hace por ti:
- Nadie está muy contento cuando se enferma. Por eso, el ejercicio ayuda a nuestros cuerpos a producir anticuerpos y proteínas que combaten las enfermedades 5
- Libera ciertas sustancias químicas, llamadas “endorfinas”, que mejoran tu estado de ánimo y promueven sentimientos de euforia
- Combate la depresión y el estrés 6
Lo que puedes hacer hoy:
- Si no tienes el hábito de hacer ejercicio, empieza con muy poco: sigue los 5 pasos fáciles de este artículo.
- Es válido combinar las 2 estrategias: naturaleza+ejercicio ¡camina en el parque algunos minutos!
- Si tú ya haces ejercicio, prueba con algún deporte nuevo, una clase de yoga, de zumba o de alguna arte marcial, verás que tu actitud mejora.
3.- Haz algo bueno por alguien
Hacer algo por los demás es una poderosa manera de aumentar nuestra propia felicidad y también dejar un granito de arena en el estado de ánimo de los demás.
Esto no significa sólo dar dinero a alguien que lo está pidiendo en la calle. Dar algo a los demás puede ser tan simple como una sola palabra amable (un buenos días antes de pedir un café, un gracias al chofer del autobus).
También puede ser una simple atención como recoger el correo del vecino o ceder el asiento en el metro.
Los estudios científicos demuestran que ayudar a los demás aumenta la satisfacción con la vida, proporciona un sentido de significado, aumenta los sentimientos de competencia, mejora el estado de ánimo y reduce el estrés 7
Se ha comprobado que regalar un poco de tu tiempo libre para hacer voluntariado, también aumenta tu percepción de bienestar 8
Lo que puedes hacer hoy:
- Proponte cumplir con una pequeña acción buena cada día para ayudar a alguien
- Si tienes la posibilidad y un poco de tiempo, participa en algún programa de voluntariado. Puede ser en una perrera, un orfanato, plantando árboles, etc. Hay miles de instituciones que necesitan de tu ayuda.
4.- Aprende o prueba algo nuevo
¿Cuándo fue la última vez que aprendiste algo nuevo? …
Si recuerdas tu infancia, sabes que de niño aprendes cada día, puede no ser algo significativo e importante. Pero siempre hay algo por descubrir.
Tristemente esto se va perdiendo con el tiempo (y no debe de ser así).
El aprendizaje afecta a nuestro bienestar en muchas maneras positivas. Nos expone a nuevas ideas y nos ayuda a mantener nuestra mente curiosa. Además nos da un sentido de logro y ayuda a aumentar nuestra confianza.
La mejor parte es que aprender algo nuevo y ser felices es un camino de dos vías: aprender algo mejora tu percepción de bienestar, y esta percepción te ayuda a aprender más cosas 9
Aprender una nueva habilidad, aunque sea pequeña, como: una técnica de primeros auxilios o una palabra en otro idioma, mejora tu capacidad intelectual y tu motivación diaria.
Aprender, también significa descubrir o probar cosas nuevas. No tienen por qué ser cosas muy grandes y ambiciosas (aunque podrían serlo), el objetivo es reinventar tu rutina haciendo espacio para cosas nuevas.
Lo que puedes hacer hoy (algunas ideas):
- Toma una ruta diferente al trabajo
- Lee un periódico distinto o un libro nuevo
- Visita una tienda que no conozcas (aunque no compres nada)
- Se turista en tu propia ciudad
- Prueba una comida de otro país o cocina una receta nueva
- Práctica un juego que no conocías (incluso esa popular app del móvil cuenta)
5.- Conversa más y cultiva relaciones
Reservar más tiempo para la gente que te importa y aumentar tus conexiones sociales, genera una sensación de satisfacción y bienestar.
Por alguna razón cuando entramos en modo «rutina» llámese: trabajo, escuela, hijos, obligaciones, deberes… nos olvidamos de hacer aquellas cosas que nos hacen felices. Como esas charlas profundas con tus amigos de toda la vida.
Nuestras relaciones con otras personas son clave para nuestra felicidad.
La conexión social forma parte de un estilo de vida saludable. Porque estas estrechas relaciones con los amigos y la familia proporcionan amor, propósito y aumentan nuestros sentimientos de autoestima.
Conversar con las personas a nuestro al rededor (escuchar y ser escuchados) nos conduce a una mayor sensación de bienestar, relaciones más fuertes y a una mejor experiencia con nuestro entorno.
Estudios demuestran que las personas con relaciones fuertes son más felices, saludables e incluso viven más tiempo. Además las conversaciones significativas te hacen más feliz 10
Si tienes a personas de confianza cerca de ti, como tu familia o amigos, no hables sólo del clima o del marcador del último partido de fútbol, mejor trata de conversar profundamente y desarrollar un espacio en elque puedas hablar de tus opiniones, pensamientos y emociones.
Nada se compara como conversar con alguien en persona, pero si esto se complica, actualmente tenemos al alcance muchas formas de comunicarnos y la mayoría de estos medios son ¡gratis!.
Así que no hay pretextos para no decirle: «hola, ¿cómo estás? » a esa persona especial.
Lo que puedes hacer hoy:
- Saluda con una sonrisa a tus vecinos
- Atrévete a conocer gente nueva
- Llama por teléfono a tus padres y abuelos
- Visita a tu familia (aunque no sea navidad)
- Haz un esfuerzo y reserva una tarde con tus amigos
Ahora ya sabes como ser más feliz y sentirte mejor con tu entorno, pero además, necesitas construir hábitos que te permitan mejorar la percepción a la inversa.
Acciones para ser feliz de adentro hacia afuera
6.- Duerme mejor
Sabemos que el sueño ayuda al cuerpo a recuperarse del día y a repararse. Además nos ayuda a comer mejor y a ser más productivos.
Pero, resulta que también es importante para nuestra felicidad.
Cuando estamos cansados, reaccionamos peor ante cualquier situación y, nos volvemos mucho más sensibles a las emociones negativas.
Lo vemos todo de forma más pesimista y, en nuestra mente sólo aparecen recuerdos grises.
Esto pasa porque los estímulos negativos se procesan en una parte del cerebro que se llama amígdala. Mientras que los recuerdos positivos o neutrales son procesados por otra zona que se llama hipocampo.
La falta de sueño impacta el hipocampo de forma más dura que a la amígdala. El resultado es que las personas con falta de sueño no logran recordar gratos recuerdos, pero si recuerdan los negativos 11
En un experimento, los participantes privados de sueño trataron de memorizar una lista de palabras. Ellos podían recordar el 80% de las palabras con una connotación negativa, como «cáncer» o “enfermedad”. Pero solo podían recordar menos del 30% de las palabras con una connotación positiva o neutral, como «sol» “sonrisa” o «árbol» 12
Además cuando no duermes lo suficiente, aumentan los niveles de una hormona llamada cortisol. Conocida por su relación con el estrés. 13.
El tiempo y lo profundo que duermas afectará tu estado de ánimo cuando despiertes, lo que puede hacer una gran diferencia en tu día.
Lo que puedes hacer hoy:
- Haz un esfuerzo por ir a la cama una hora antes de lo que acostumbras
- Lee este artículo con los pasos para crear un ritual que te ayude a dormir mejor y despertar de bueno humor a partir de esta noche.
7.- Proponte y planea tus metas
Se ha demostrado científicamente que el sentirse bien con el futuro es importante para nuestra felicidad 14
La elección de objetivos ambiciosos son una brújula que te dan dirección. Además traen un sentido de logro y satisfacción cuando los alcanzamos.
Todos necesitamos metas para motivarnos y estas deben ser lo suficientemente retadoras para emocionarnos, pero al mismo, tiempo tus metas deben de ser alcanzables.
Si tratamos de planear algo alejado de nuestra realidad en este momento, sólo sentiremos ansiedad y estrés innecesario, además si no lo logramos en el tiempo planeado sentiremos una especie de derrota que no contribuye a fortalecer nuestra autoestima 15.
Cuando pensamos en el futuro todos estamos adivinando hasta cierto punto, por eso, es importante mantener los pies en el suelo. Una perspectiva demasiado optimista puede ser inútil e incluso contraproducente.
Tener expectativas poco realistas puede conducir a la decepción, una sensación de fracaso y una visión más pesimista del futuro. Pero si tomamos una visión realista pero al mismo tiempo optimista de los resultados, aumentara la probabilidad de tener éxito.
Sin embargo, el planear y tener objetivos más realistas y alcanzables pueden contribuir a la felicidad de varias maneras. La a investigación científica muestra que el simple hecho de planear estos objetivos genera un sentimiento de positivismo en el día a día, por ejemplo el planear unas vacaciones a futuro 16
En otro estudio, se demostró que el simple hecho de pensar una experiencia gratificante próxima (como ver una película que te gusta, o la tarde con los amigos) eleva tus niveles de endorfinas en un 27% y reduce tus niveles de estrés. Las endorfinas son sustancias en tu cerebro responsables del sentimiento de euforia y alegría. 17
Por lo tanto, tener metas alcanzables y planearlo de forma realista es una forma de ser feliz en tiempo presente. Las metas pueden ser a largo plazo, a corto plazo o incluso día a día.
Por ejemplo:
Un objetivo a largo plazo podría ser convertirse en un médico o ganar una competición.
Un objetivo a corto plazo podría ser organizar una fiesta o unirse a un partido de fútbol el fin de semana.
En cambio una meta a muy corto plazo puede ser cocinar algo diferente o quedar con un viejo amigo esta tarde.
Lo que puedes hacer hoy (algunas ideas):
- Escribe tus metas a largo plazo ¿cómo te vez en unos cuantos años?
- Planea un viaje para el futuro (aunque aún no tengas una fecha concreta)
- Busca los próximos estrenos de algunas películas y programa una escapada al cine
- Planifica con antelación tu próximo fin de semana, ¿qué te gustaría hacer?
- Invierte tu dinero en experiencias y no en cosas materiales, pues se ha visto que contribuye más a tu felicidad a corto y largo plazo18
8.- Agradece las pequeñas cosas
Esta es una estrategia aparentemente simple, pero he encontrado personalmente que sí puede hacer una gran mejora en tu sensación de felicidad diaria.
Tal vez nos dejamos llevar por las circunstancias del momento, o tal vez anhelamos cada vez más cosas y exigimos al cielo y a la vida tenerlas lo antes posible.
Algo así como:
-“Cuando tenga una casa con piscina seré feliz” o -“Cuando logre terminar mi carrera y tener mejor trabajo, estaré plenamente satisfecho”
Y entonces… tienes la casa y el trabajo y aún no eres feliz.
Detenernos y observar todo lo que ya tenemos y agradecerlo es una de las mejores formas para valorar nuestro presente y sentirnos más satisfechos con lo que somos y lo que tenemos.
En un experimento los participantes escribieron cada día sobre aquello que los hacía sentirse agradecidos, sus estados de ánimo mejoraron en los primeros días de esta simple práctica. Los resultados sugieren que un enfoque consciente de agradecer puede tener beneficios emocionales e interpersonales.
En otro estudio se demostró que el estar agradecido o no estarlo, afecta directamente tu percepción de felicidad. Los participantes que escribieron cartas de agradecimiento disminuyeron los síntomas depresivos. 19
Lo que puedes hacer hoy:
- Antes de dormir piensa o escribe 3 cosas por las que estás agradecido. Pueden ser cosas muy importantes como tu familia, amigos o un bebé en camino, pero, también pueden ser cosas bastante comunes como, comer tu helado favorito, tu cama, las monedas en tu alcancía o el simple hecho de tener aire en tus pulmones
9.- Recuerda algo y sonríe
¿Alguna vez te reíste solo por recordar algo gracioso?
Esto pasa porque nuestros pensamientos definen nuestro estado de ánimo del momento. De tal forma que, una imagen o un recuerdo agradable, desencadena una sensación positiva.
Una vez que los músculos sonrientes se contraen, comienza un circuito de retro-alimentación positiva que refuerza nuestro sentimiento de alegría.
Por eso, es importante sonreír todos los días. Incluso durante esas situaciones en las que no podemos hacer nada (pero nos afectan).
Pensaras que es difícil e incluso inútil, pero te equivocas…
Sonreír sí puede hacernos sentir mejor, pero este efecto es más eficaz cuando lo respaldamos con pensamientos positivos.
Un nuevo estudio 20 sugiere que una falsa sonrisa puede empeorar tu estado de ánimo. Se examinaron los efectos de una sonrisa falsa y una sonrisa como resultado de recuerdos agradables o de una mejor percepción de la situación actual.
Los participantes, que sonrieron como resultado de cultivar pensamientos positivos profundos (como unas vacaciones tropicales o el festival de tu hijo) tendieron a mejorar su estado de ánimo de forma impactante.
En pocas palabras: nuestro cerebro se siente bien y nos dice que hay que sonreír, sonreímos y decimos a nuestro cerebro que se siente bien y así sucesivamente.
Lo que puedes hacer hoy:
- Piensa en algo bonito, recuerda algún chiste, o alguna situación graciosa que estimule tu sonrisa.
- Piensa en la mejor situación del día o de los días anteriores ¿qué te hizo sentir bien?
- Escucha música con la intención de sentirte bien. Las investigaciones muestran que escuchar música con el objetivo y el deseo de ser más feliz en realidad puede conducir a una mayor felicidad que simplemente escuchar música por el bien de escuchar 21
10.- Aprende a controlar tus pensamientos
Aprender a controlar tus pensamientos es una habilidad para mejorar tu felicidad interior. Una forma efectiva de entrenar este súper poder es meditando.
La meditación es a menudo considerada como un hábito importante para mejorar la concentración y disminuir el estrés, pero, resulta que también es útil para mejorar tu felicidad:
Nuevos investigaciones en neurociencia han descubierto que aquellas personas que meditan de forma habitual, modifican literalmente su estructura cerebral 22
En un estudio, se examinaron las radiografías cerebrales de 16 personas antes y después de un curso de ocho semanas de meditación y atención plena. Las partes de los cerebros asociadas con la compasión, la conciencia de sí mismo y la felicidad crecieron, y las partes asociadas con el estrés disminuyeron su tamaño.
Pero no te preocupes, no tienes convertirte en un monje y encerrarte en un templo para lograrlo.
Puedes comenzar a meditar con el simple hecho de relajarte (y no hacer nada mientras tanto). Es una forma de darle un respiro a tu mente.
A veces el simple hecho de sobre-pensar lo que tenemos que hacer, nos genera una sensación negativa anticipada. Por eso, relajar tu mente unos cuantos minutos al día es una excelente estrategia para calmar la ansiedad y evitar sentimientos negativos, durante el día.
Meditar requiere de práctica, pero es una actividad muy poderosa. Borra literalmente tu mente y te tranquiliza, se ha demostrado ser una forma eficaz de ser feliz y sentirte mejor.
Dedicar unos minutos para meditar, es en realidad una inversión de vida. Llevo algunos meses practicando y he notado resultados increíbles. Y tú también puedes experimentarlos.
Lo que puedes hacer hoy
- Tomate unos minutos para cerrar tus ojos, relajarte y respirar profundamente
- Si quieres aprender a meditar y sentirte mejor solo haz click aquí para inscribirte en el próximo curso gratis
Y tú ¿qué haces para sentirte mejor y levantarte el ánimo? ¿qué hábitos en tu vida contribuyen con tu felicidad? comparte conmigo tu respuesta en los comentarios de aquí abajo.